En medio de rumores que lo ubicaban nuevamente en Italia, Walter Samuel fue tentado por el Inter de Milán, club en el que brilló como futbolista, para sumarse como asistente técnico del nuevo proyecto encabezado por Cristian Chivu. Algunos medios incluso daban por cerrada su llegada. Sin embargo, el ex defensor campeón del mundo con Argentina decidió mantenerse firme en su actual rol: seguirá acompañando a Lionel Scaloni en el banco de la Selección Argentina.
A pesar del fuerte vínculo emocional que lo une al Inter, club con el que vivió algunos de los momentos más gloriosos de su carrera como jugador, Samuel optó por darle continuidad al exitoso proceso que lo tiene como una de las piezas clave del cuerpo técnico albiceleste. La propuesta italiana fue agradecida, pero no aceptada.
Un llamado de un amigo y una respuesta con el corazón
El propio Scaloni se encargó de aclarar la situación durante una conferencia de prensa. Ante los micrófonos, reveló que el ofrecimiento partió de una relación cercana: “Hubo un llamado de Chivu, que es su amigo, para ver si lo acompañaba en el Inter y, bueno, Walter agradeció el llamado, pero tiene un compromiso con nosotros”, explicó el DT argentino.
La decisión, según el entrenador, tiene una carga emocional muy profunda. “Lógicamente que le duele en el alma no poder ir, pero bueno, así está la cosa y tema cerrado”, añadió Scaloni. No solo destacó la profesionalidad del ex defensor, sino también el cariño y la lealtad que demuestra hacia el proyecto de la Selección.
Una pieza silenciosa pero vital en la Scaloneta
Más allá de su bajo perfil, Samuel es un engranaje fundamental en el funcionamiento del cuerpo técnico que llevó a Argentina a lo más alto: campeón del mundo en Qatar 2022, bicampeón de América y ganador de la Finalissima. Su influencia sobre el equipo, especialmente en el aspecto defensivo, es incuestionable.
Además de su labor táctica, el “Muro” mantiene una relación cercana con muchos de los jugadores habituales del plantel, especialmente con los líderes del vestuario. Su presencia es respetada y valorada, no solo por su experiencia, sino por su forma de trabajar en silencio, con compromiso y humildad.
La Selección, un compromiso que vale más que una oferta
El llamado del Inter podría haber sido una despedida lógica y emotiva, pero Walter Samuel priorizó algo más fuerte que la nostalgia: el sentido de pertenencia. Rechazó una oferta millonaria y una chance de regresar a un club donde es ídolo, para seguir siendo parte de un ciclo que busca seguir haciendo historia con la celeste y blanca.
Con esta decisión, el ex defensor reafirma su lugar como uno de los pilares emocionales y tácticos del equipo nacional. Su elección no solo fortalece al grupo, sino que vuelve a dejar en claro que, para esta generación, la Selección Argentina es más que un trabajo: es una causa.