Novak Djokovic siempre fue medido a la hora de opinar sobre su lugar en la historia del tenis. Sin embargo, en una reciente entrevista con DAZN, el serbio decidió salirse del libreto y aceptar el desafío: armar su top 5 de todos los tiempos. Lo más impactante no fue solo a quién puso en el primer lugar, sino a quién decidió excluir, a pesar de tener 24 títulos de Grand Slam en su haber.
Lo hizo bajo una consigna particular: debía ir ubicando cada nombre en su lista sin saber qué jugador le tocaría a continuación. Y con esa regla clara, Djokovic se animó a dar una respuesta que reavivó el eterno debate sobre quién es realmente el más grande del deporte blanco.
Nadal, por encima de todos
El primero que surgió en la charla fue Pete Sampras, uno de sus ídolos de la infancia. A pesar del respeto, lo colocó en el tercer lugar. Luego apareció el nombre que marcaría el resto de su ranking: Rafael Nadal. Con convicción, Djokovic respondió: “Primero”, sin dudar. Lo ubicó por encima de todos, incluso de sí mismo, y justificó la elección por la magnitud de su rivalidad y la admiración que siente por el español.
“Rafa” acumula 22 Grand Slams y ha sido su competidor más constante, con un historial personal que roza la paridad: 31 victorias para Djokovic, 29 para Nadal. La elección fue un gesto de grandeza, pero también una declaración emocional.
Federer quedó segundo, y Djokovic ni figura
Luego fue el turno de Roger Federer, a quien situó en el segundo puesto, seguido por Andre Agassi en el cuarto y Andy Murray en el quinto. Más allá del orden, lo verdaderamente llamativo fue la ausencia de su propio nombre en la lista. A pesar de ser el máximo ganador de Grand Slams en la historia, Djokovic optó por no incluirse. Un acto de humildad que pocos esperaban.
La entrevista dejó entrever que para Djokovic la grandeza no pasa solo por los números, sino por el impacto que cada jugador deja en el deporte.
Serena Williams también eligió… y tampoco fue Djokovic
En otra arista del mismo debate, Serena Williams, leyenda del tenis femenino con 23 títulos de Grand Slam, también dio su opinión sobre el mejor de la historia. Durante una conferencia en el Abierto de Emilia-Romagna 2021, fue tajante: “Roger Federer”. Lo elogió no solo por sus logros, sino por su elegancia, estilo y capacidad de cambiar el juego.
Ambas opiniones, tanto la de Serena como la de Djokovic, coincidieron en destacar a sus rivales por encima de cualquier ego personal. En tiempos donde los récords dominan las conversaciones, ambos eligieron valorar el legado intangible que deja cada figura.
Más allá de los números, la huella emocional
Aunque los fríos datos colocan a Djokovic en la cima del tenis mundial, las voces de los propios protagonistas invitan a mirar más allá. Elegir a Nadal o Federer no solo es una elección técnica, también es una cuestión de identidad, estética y emoción.
El debate sobre quién fue el mejor tenista de todos los tiempos sigue abierto, pero cuando los propios ídolos eligen a sus rivales como los verdaderos grandes, el mensaje es claro: la grandeza no siempre se mide en trofeos.