Los fanáticos del tenis han debatido durante años quién es el mejor en la cancha. Pero lejos del polvo de ladrillo y del césped de Wimbledon, hay otra competencia que también despierta pasiones: la fortuna personal de los “3 grandes”. En esa batalla de billeteras, Roger Federer toma distancia de sus eternos rivales.
Roger Federer: el tenista de los mil millones
Aunque colgó la raqueta en 2022, Roger Federer continúa acumulando riquezas a un ritmo vertiginoso. Según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg, su fortuna ya ronda los 1.300 millones de dólares, convirtiéndose en el primer tenista en ingresar al exclusivo “club de los mil millones” dentro del deporte mundial.
Su acuerdo con Uniqlo, que le garantiza cerca de 30 millones de dólares por año durante una década, es apenas una muestra. A eso se suman colaboraciones duraderas con Rolex, Mercedes-Benz, Lindt y Credit Suisse, que siguen apostando por su imagen de caballero elegante y símbolo de excelencia.
Además, su visión como empresario lo llevó a invertir en On Running, la marca de zapatillas suiza de la que posee un 3% de las acciones. La valorización de esta firma en los últimos años le habría reportado alrededor de 500 millones de dólares extra.
Rafael Nadal: premios sí, inversiones no tanto
En el segundo puesto aparece Rafael Nadal, con un patrimonio estimado en 310 millones de dólares. El español ganó 134 millones en premios a lo largo de su carrera, incluso más que Federer. Sin embargo, sus ingresos por patrocinio y negocios han sido mucho más modestos.
Su perfil más reservado y su enfoque centrado exclusivamente en el deporte podrían haber limitado su desarrollo empresarial. Aunque marcas como Kia, Nike o Babolat lo acompañaron durante años, Nadal no diversificó tanto como su colega suizo.
Novak Djokovic: el rey de los premios, pero no del dinero
Novak Djokovic es el líder absoluto si solo se consideran los premios obtenidos en torneos: 188 millones de dólares lo posicionan por encima de todos. Sin embargo, su patrimonio neto ronda los 240 millones de dólares, quedando tercero en este ranking financiero.
El serbio todavía está activo y, con 37 años, podría seguir compitiendo al más alto nivel por un tiempo más. Su retiro abrirá nuevas oportunidades para explotar su imagen y expandirse en el mundo de los negocios. Hasta ahora, ha sido más discreto en cuanto a inversiones, pero su tiempo fuera del circuito recién empieza.
