Esta semana se conocieron las cifras parciales de personas en situación de calle del 3er Censo Popular realizado por varias organizaciones. De acuerdo al relevamiento, 11.892 personas duermen a la intemperie, una cifra que contrasta con las 4.049 que difundió el censo oficial del Gobierno de la Ciudad. El crecimiento de las personas en situación de calle se ve a simple vista y, hasta el momento, hubo 13 hombres y mujeres que fallecieron en lo que va del año solo en el distrito porteño.
Mientras todo esto ocurre, la auditoría porteña difundió un relevamiento que deja en evidencia la responsabilidad de la gestión macrista en la ausencia de políticas habitacionales y la decisión de no implementar las pocas iniciativas con las que cuenta. No solo no utiliza los recursos necesarios para el acceso a la primera vivienda, sino que tampoco habilita los programas vigentes para acceder al alquiler de las propiedades.

Foto: Mariano Sanchez / NA
En esta ocasión, la Auditoría General de la Ciudad, puso el foco en el Plan Alquilar, una iniciativa conformada por distintos programas de asistencia social, cuyo objetivo es promover el alquiler social en forma directa a aquellos grupos familiares vulnerables y en situación de riesgo.
La auditoría relevó el alcance y el impacto del plan social durante el año 2023, en los programas Garantía+Fácil, Alquilar+Fácil y Refacción+Fácil. El trabajo realizado expuso la decisión política del gobierno porteño de rechazar la mayor cantidad de solicitudes. De un total de 3996 pedidos para acceder a los programas, la gestión macrista aceptó solo 264. Es decir, más del 93% de las solicitudes realizadas por personas vulnerables fueron rechazadas por el gobierno porteño.
El desagregado del relevamiento de las diferentes iniciativas muestra que el programa Alquilar+Fácil, suma la mayor cantidad de solicitudes negadas (96.40%) por la gestión porteña: los grupos de familias vulnerables realizaron 1.650 solicitudes, fueron rechazadas 1.591 y apenas habilitaron 59.
Respecto al programa Garantía +Fácil, realizaron 2.035 inscripciones y fueron otorgados 192 beneficios (90.60% de rechazos); y por último, la iniciativa Refacción +Fácil, recibió un total de 311 solicitudes y fueron otorgadas apenas 13, es decir, el 95,8% de las mismas fueron rechazadas.
Quien tiene el monopolio de la entrega de estos planes es el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC), dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat. Si bien el organismo es el encargado de llevar a cabo la política habitacional en la Ciudad de Buenos Aires y de facilitar el proceso de alquiler a través de financiamiento y créditos hipotecarios, los datos de este relevamiento dejan en evidencia que realiza una tarea adversa a la que tiene asignada.
Sin acceso a la primera vivienda y tampoco al alquiler
Las iniciativas del poder ejecutivo mencionadas tienen como objetivo asistir a los inquilinos a través del otorgamiento de seguros de caución, créditos para cubrir gastos iniciales de vivienda (depósito, garantía, mes inicial y mudanza) y financiamiento para realizar refacciones en el domicilio.
Respecto a los rechazos para poder acceder a los programas de alquiler y garantía, según el Instituto de la Vivienda, asegura que los solicitantes no completaron la documentación requerida para avanzar con el otorgamiento del crédito, a la vez que señaló el incumplimiento de “no tener antecedentes financieros».
En el caso de quienes no recibieron financiamiento del programa de refacción, el IVC señaló que hubo antecedentes negativos financieros a partir del cruce de información con el Banco Central, otorgamiento de crédito social por o con intervención del Instituto de Vivienda en los últimos 10 años, e incumplimiento de requisitos como contar con la vivienda vacía, tener escritura y demás documentación respaldatoria.
Más demanda en el norte porteño
Un dato significativo evidenciado por la Auditoría de la Ciudad es que los mayores beneficiarios que fueron habilitados para ingresar al Plan Alquilar son de la zona norte de CABA, más precisamente en las comunas 13 (Núñez, Belgrano y Colegiales) y 14 (Palermo); al mismo tiempo que detectó una demanda mucho menor en “los barrios más vulnerables del sur”.
En ese sentido, la auditoria local apuntó a la necesidad de “realizar un análisis para abarcar una población inquilina de las zonas que presentan niveles más bajos de condiciones socioeconómicas y de informalidad en cuanto a la celebración de los contratos”.
Falta de evaluación
La auditoría porteña demostró que el IVC «no realizó una evaluación de impacto de resultados cuantitativos y cualitativos de los programas que integran del Plan Alquilar en la Ciudad -Alquiler, Garantía y Refacción+Fácil-«, debido a que, según el mismo IVC, no cuentan con una muestra significativa estadística de créditos que fueron otorgados.
Ante esta situación, el organismo de control porteño exhortó a que se realice una evaluación con datos cuantitativos y cualitativos sobre el impacto del Plan Alquilar con el argumento de que “la ausencia de un informe de impacto puede obstaculizar la capacidad de tomar decisiones sobre el Plan Alquilar en la Ciudad, lo que afecta tanto a los responsables de diseñar y gestionar políticas públicas como a los ciudadanos que dependen de dichos programas”.