Más allá de las diferencias discursivas plasmadas durante la campaña electoral, Jorge Macri y Javier Milei sostienen un pacto para profundizar el ajuste en la Ciudad de Buenos Aires, incluso antes que se reconfigure la Legislatura porteña y asuman los nuevos legisladores de la lista de Manuel Adorni a partir del 10 de diciembre de este año. Una fuente cercana a LLA, confesó a este medio que todo apunta a que el parlamento local funcione como un cogobierno entre el espacio libertario y el macrismo porteño: “hay que hacer recortes importantes acá. Macri ya lo venía haciendo y ahora LLA va por todo lo que falta. El recorte en educación es uno de ellos”, señaló.
Al ser consultado sobre qué proyectos de Ley presentará LLA a partir de diciembre en la Legislatura, manifestó: “falta mucho para diciembre ahora estamos hablando con el PRO para empezar con los recortes que hagan falta”. La declaración deja en evidencia un pacto electoral entre ambos espacios.
Nada de todo esto resulta extraño, más teniendo en cuenta que días previos a las elecciones porteñas, el Ejecutivo local cerró definitivamente el jardín maternal que compartían el Colegio N°11 Hipólito Yrigoyen y la Escuela de Comercio N°1 Joaquín V. González, para hijos e hijas de estudiantes de ambas escuelas.
“Es un jardín que funcionaba desde el año 2014 y que se logró tras varios años de lucha, de presentaciones ante el Ministerio, de juntadas de firmas, de reclamos; porque en el turno noche nuestra escuela, como sucede en otras, tiene una población de alumnas madres y alumnos padres históricos, en la cual estudian adolescentes y personas adultas también”, contó a Tiempo Sebastián Hereñú Legna, delegado de Ademys de la Escuela de Comercio N°1.
Si bien hace varios años que el Gobierno porteño intenta cerrar este jardín maternal, uno de los últimos avances se dio hace tres años, tras la cuarentena en el marco de la pandemia.

“Desde que retomamos, fueron intentando que el espacio se cierre. Hace dos años quisieron levantarlo, y el año pasado también, con diferentes argumentos: escasa matrícula, usar mejor los recursos, enviarnos a otro lado; y este año directamente, desde la coordinación de primera infancia, tuvieron una reunión en el Ministerio y a partir de ahí empezaron a hablar con las alumnas madres para informar el cierre”, agregó Legna.
Tiempo se contactó con el Ministerio de Educación porteño para conocer los argumentos que llevaron al cierre de este jardín maternal. Desde la cartera que conduce Mercedes Miguel utilizaron el argumento de las cifras de “baja natalidad en el distrito”, para llevar adelante la clausura de la institución educativa.
Más allá de este dato que es cierto, el cierre de una escuela pública en la Ciudad no solo afecta a las familias que viven en este terruño, en especial complica la situación de millones de personas que trabajan a diario en la Ciudad y que necesitan irremediablemente que sus hijos estudien en una escuela ubicada en las cercanías de sus trabajos.
Norma Ramírez es docente. Trabaja desde el año pasado en el jardín que cerró el GCBA. “Tomé el cargo en febrero del 2024 porque necesitaba ese horario para en el día dedicarme a otras cosas. Yo trabajo en forma particular también y crío a mis hijos que son chiquitos” explicó a este medio.
Las autoridades escolares no les informaron del cierre a las docentes, se encontraron con el cierre del edificio cuando se acercaron a cumplir su labor diario.
“Siempre estaban estas noticias del cierre del jardín. Pero este año comenzamos varios chicos, con una buena matrícula, es por eso que no se entiende el cierre de esta escuela”, agregó Norma.
El miércoles 14 de mayo, las docentes, recién se enteraron que las autoridades habían hablado con las mamas sobre el cierre de este jardín. “Una mama no aceptó que transfieran a su hijo a otro establecimiento educativo y estaba angustiada porque no tiene dónde dejar a su hijo y ya no puede terminar sus estudios secundarios”, sumó Norma.