La campaña de Cristina ya empezó. El momento de la largada sucedió el lunes, cuando ella misma le confirmó tres veces al periodista Gustavo Sylvestre que el 7 de septiembre será candidata en la tercera sección de la provincia de Buenos Aires. “La política no es un escalafón”, argumentó en el estudio central de C5N y con casi un millón de televidentes siguiéndola en vivo, entre la visualización tradicional y el canal de YouTube. Pero si la campaña ya empezó, porque CFK se presentó ante la sociedad como candidata, los próximos cuarenta días serán determinantes. El 19 de julio es la fecha para inscribir las candidaturas que competirán en la elección bonaerense.
Este miércoles, como se sabe, la Corte Suprema rechazó la recusación de CFK al juez Ricardo Lorenzetti en la causa Vialidad. Medios y editorialistas que siguen el día a día de los cortesanos vaticinaron (o, más bien, expresaron su deseo de que eso ocurra) una mala noticia para la dos veces presidenta, pero también para sus votantes. Deslizaron que la Corte podría dejar firme la condena incluso en el tramo definitorio de un año electoral. Consultados por este diario, en el Instituto Patria señalaron que, una vez lanzadas las candidaturas, el sistema judicial no podría impedir la participación de Cristina.
Con esta inquietud sobrevolando el escenario, la dos veces presidenta se prepara para seguir en el centro de la conversación pública. Este sábado visitará la ciudad correntina de Paso de los Libres con la intención de apoyar de cuerpo presente al candidato a gobernador del peronismo, el intendente local Martín “Tincho” Ascúa. Hasta entonces tendrá dos días de mucha actividad en CABA; a su regreso de Corrientes se mantendrá en territorio porteño: no tiene previsto ningún viaje al sur, según confirmaron a Tiempo desde su equipo de colaboradores.
Serán, las que vienen, jornadas rodeadas de expectativa; también de cierto misterio. En el PJ bonaerense creen que entre el final de esta semana y los primeros días de la próxima podría concretarse la -largamente postergada- cumbre entre la propia CFK y el gobernador Axel Kicillof. “Se va a producir cuando tenga que producirse”, eludieron cualquier definición desde el equipo más cercano a la exvicepresidenta. Eso sí, pese al misterio valoraron que “puedan sentarse a charlar dos personas que han tenido mucho afecto entre ellos”. Y agregaron: “Axel, además, debe tener mucho agradecimiento hacia Cristina”.
La información de que CFK había ordenado a su secretario comunicarse con el secretario de Kicillof circuló con fuerza en la tarde del martes. La novedad fue ratificada desde ambos campamentos. En la instalación de la noticia colaboraron dirigentes cercanos o de buena relación con Cristina: una de ellas fue la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza. La difundió en una entrevista con el streaming Gelatina. También hizo lo suyo el alcalde de Escobar, Ariel Sujarchuk, integrante del consejo del PJ como secretario de Innovación Tecnológica, Inteligencia Artificial y Criptografía. “Existió un llamado, cerca del mediodía la expresidenta se comunicó con el gobernador”, reveló en una visita al canal LN+.
Consultados por Tiempo, allegados de confianza del gobernador aportaron algunas precisiones sobre el contacto. Ratificaron, como había circulado el martes, que hubo una “comunicación breve, cordial” entre la exmandataria y el gobernador. Y añadieron que ambos quedaron en “volver a hablar en los próximos días”. “Cuando puedan los dos”, acotaron desde La Plata. Además resaltaron que “aún no se acordó” si la conversación por venir será telefónica o en persona.
La difusión del inicio de un acercamiento no fue casual. Buscó generar efectos entre los dirigentes alineados con uno u otro bando, sobre todo entre los intendentes de la tercera sección. Uno de los jefes comunales más cercanos a Kicillof, el intendente de Ensenada Mario Secco, se mostró incrédulo sobre el contacto. “Es una operación”, minimizó. Pero además advirtió sobre el crecimiento del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el espacio axelista.
“El armado que hoy tiene el gobernador es muy importante. ¿Usted cree que si jugamos todos los intendentes de (candidato) testimonial no ganamos?”, afirmó Secco, en una entrevista a Radio con Vos. Así planteó la posibilidad de que intendentes decidan ponerse al frente de las listas de concejales. Eso se concretaría, según deslizó, en una boleta distinta a la que lleve a CFK como primera candidata a diputada provincial. Otra idea que se menciona en el sector es el formato de las ‘listas cortas’, solo para concejales.
Voces que conocen al conurbano deslizan que estas definiciones, si se hacen públicas, suelen ser parte del combo: presionar para acordar al final del camino. Otros, sin embargo, parecen convencidos sobre este tipo de opciones. Los intendentes de la tercera sección que adhieren al MDF son el propio Secco más Jorge Ferraresi (Avellaneda), Andrés Watson (Florencio Varela), Julio Alak (La Plata), Fernando Espinoza (La Matanza) y Mariano Cascallares (Almirante Brown). Quienes dialogan con ellos entienden que no todos comparten la misma postura. Como en todo espacio político, hay “halcones” y “palomas”.
El axelismo también tiene representantes en la primera sección electoral de la PBA (norte y oeste del Gran Buenos Aires). Algunos de esos nombres son Fernando Moreira (San Martín), Pablo Descalzo (Ituzaingó) y Lucas Ghi (Morón). Un dirigente con conocimiento público que proviene de esa sección es el ministro de Infraestructura bonaerense, Gabriel Katopodis, quien supo gobernar San Martín. El nombre de Katopodis suena como posible primer candidato a senador provincial por esa región.
El panorama general está en ebullición; el rumbo, en todo caso, parece ir hacia la una lista única. Así lo describió el moronense Ghi tras una consulta de este diario: “Me parece que se están extremando las medidas para poder confluir en un espacio común”, dijo. Y sobre la postulación de CFK agregó: “Ya había algún trascendido. Estaba dentro de las variantes posibles. Ojalá que la candidatura ayude a darle volumen y competitividad al espacio, que necesita hoy más que nunca ser la expresión del descontento que genera en amplísimos sectores de la sociedad el gobierno de Milei”.
En cuanto al tercer polo peronista, el Frente Renovador apunta a reservar a Sergio Massa para las elecciones nacionales del 26 de octubre. El massismo, de cualquier modo, protagonizó en las últimas horas una movida muy fuerte en la Legislatura (una decisión que tendrá impacto electoral). La senadora provincial Sofía Vannelli, del FR, se ausentó de una sesión y con su faltazo hizo caer el proyecto que habilitaba la reelección de legisladores. Eso generará vacantes y obligará al recambio en ambas cámaras: cada intendente, en la medida de lo posible, intentará ubicar algún dirigente cercano.
En este mapa atravesado por negociaciones y amenazas, CFK y Kicillof tendrán que encontrar una definición aceptable -o digerible- para ambas partes. En el Instituto Patria adelantan que la presidenta del PJ adoptará un formato de campaña que apelará a “apariciones sorpresa en lugares afectados por la política de Milei”, algo similar a lo que hizo en 2024, pero en combinación con “actos tradicionales y entrevistas en medios”.
Kicillof, por su lado, buscará sostener su armado político, que el último sábado realizó una demostración de fuerza con un plenario en el camping de la seccional bonaerense de UPCN. En ese acto, Kicillof condenó la persecución a Cristina y repudió al “Partido Judicial” que, según advirtió ante miles de personas, busca condenarla “sin una sola prueba”. “El peronismo sufrió persecución muchas veces. Sabemos que es para disciplinar a los que luchan y representan”, alertó.
