Unidos y organizados. Montando un homenaje de bajo calibre al viejo líder, en La Libertad Avanza parece volver a reinar la armonía que supo caracterizarlos en el primer año de gobierno. Con el cierre de listas ya atrás, todo el aparato violeta vuelve a mostrarse como una masa homogénea y trabaja en equipo para montar la estratégica bélica con la que desembarcarán en la siempre turbulenta Provincia de Buenos Aires.
El primer paso de este reacomodamiento político fue la decisión de todas las tribus libertarias de bajar las tensiones luego del agitado cierre bonaerense. Aquel sábado, Las Fuerzas del Cielo, la orga juvenil apadrinada por Santiago Caputo, sintió el rigor y conoció de primera mano de qué está hecha la casta.
Con ultrajantes recompensas en las nóminas, el piberío celestial vio desvanecerse su sueño electoral entre las manos de Sebastián Pareja y Eduardo «Lule» Menem, los fieles armadores de Karina Milei.
Caputo y los trolls: del descarte al reencuentro

Las primeras horas que sucedieron al cierre fueron, cuanto menos, hostiles. No sólo por el desgano general y la toma de conciencia del manejo de poder. En la tropa caputista, reinaba un clima de incertidumbre que descansaba en la por entonces nublada visión de futuro que hermanaba a los treintañeros, que pese a todo acataron a rajatabla la orden de su jefe de no salir a mostrar signos de descontento.
Todo, sin embargo, cambió a fines de la última semana, cuando algunos movimientos indicaron el cese del fuego.
El martes, los equipos comunicacionales de Lule y Pareja recibieron en sus oficinas a Tomás Vidal, mano derecha de Caputo y miembro fundador de Move, la consultora que comanda el tridente que se completa con Rodrigo Lugones.
Aquel primer encuentro tenía como objetivo que el enviado del amante de las armas se pusiera en actas sobre la estrategia que aspiraban llevar adelante en PBA. La hoja de ruta, sin embargo, estaba lejos de ser lo que el experto en comunicación esperaba.
Desde el menemismo reconocieron que la elección de candidatos no se gestó en base a análisis del electorado, sino por pura rosca. Una complicación extra para una elección que ya de por sí tiene poco interés para el público general.
Con este escenario, y como dio a conocer en exclusiva este diario, Santiago Caputo y Karina Milei se reunieron el miércoles por la noche a solas. En aquella reunión, la primera juntos después del turbulento y disciplinador cierre, los socios mayoritarios del Triángulo de Hierro cerraron filas y, por pedido expreso de la secretaria general, acordaron que el asesor abandonará el exilio autoimpuesto y se meterá de lleno en la configuración de una campaña poco atractiva. Ni más, ni menos.
En abril, cuando la postulación de Manuel Adorni como candidato ya era un hecho, todos los campamentos del oficialismo aunaron fuerzas por el bien común. Tanto así, que Pilar Ramírez, la mano derecha en territorio porteño de la hermanísima, logró una excelente convivencia con Macarena Alifraco y Lucas Luna, principales exégetas del asesor.
Si bien no está claro que ambos vuelvan a tener ese rol -en rigor, «Sagaz» está vetado del menemismo por el conflicto digital que tuvo con el menor del clan, Sharif-, lo cierto es que el Salón Martín Fierro estará representado en la forma que adopte la nueva mesa de campaña.
Polarización con el kirchnerismo
Similar a lo que ocurrió en la Ciudad, la estrategia descansará en la dicotomía «kircherismo o libertad», el slogan que ideó Caputo para aquella contienda. Con la intención de disputar la agenda local, el discurso estará centrado en la seguridad y las abismales diferencias que separan al oficialismo nacional con Fuerza Patria, el nuevo espacio que aglutinó al peronismo hegemónico. La candidatura en la tercera del ex comisario de la bonaerense, Maximiliano Bondarenko, es sólo una muestra gratis de ello.
Por el momento, no está confirmado que Javier Milei baje al territorio para apoyar a toda la tropa. Sin embargo, no sería descabellado que se muestre en algún evento con los intendentes-candidatos, Guillermo Montenegro y Diego Valenzuela.
Los ex macristas fueron los primeros en alinearse con el modelo libertario, por lo que un gesto del presidente podría ser una recompensa más que interesante para los barones bonaerenses con hambre de subir de nivel.
Lo mismo podría ocurrir con el vocero presidencial, quien auspició la candidatura de su hermano, Francisco, en la octava. Con la garantía del apellido, se espera que el Adorni no-funcionario rompa el silencio en la próxima semana e inicie un raid mediático para lograr posicionarse en la sección que el peronismo aspira a conquistar.
Según confirmaron fuentes al tanto de la estrategia a Tiempo, La Libertad Avanza iniciará formalmente la campaña el próximo 8 de agosto, momento en el que se formalizarán las boletas. Hasta entonces, continuarán las reuniones cruzadas. ¿Habrá tiempo en estos encuentros para coordinar la relación con los gobernadores y seleccionar los nombres que el oficialismo presentará para completar el nuevo congreso? Por ahora, puras especulaciones.