El futuro de Alejandro Garnacho en el Manchester United atraviesa un momento de incertidumbre. Apartado del plantel por decisión del técnico Rúben Amorim, el delantero argentino parece haber encendido las alarmas del mercado con una sutil acción que no pasó inadvertida para los fanáticos ni para la prensa internacional.
Sin dar declaraciones públicas, Garnacho optó por un movimiento silencioso pero contundente: le dio “me gusta” a una publicación del periodista Fabrizio Romano en la que se mencionaba el interés del Chelsea en incorporarlo.
Romano aseguró que, aunque todavía no hay conversaciones formales, el argentino figura entre las opciones del conjunto londinense para este mes. “Garnacho sigue en la lista para más adelante en agosto. No hay charlas por ahora, pero el Chelsea mantiene su nombre en carpeta, va a llegar”, publicó el especialista, señalando que Xavi Simons y Garnacho son las dos prioridades si los Blues logran liberar espacio en la plantilla.
Chelsea espera movimientos internos
El interés del Chelsea no es inmediato. Antes de poder hacer una oferta concreta, el club necesita resolver salidas importantes. Con la partida de Joao Félix confirmada rumbo a Arabia, aún quedan por definir los futuros de Raheem Sterling, Nkunku, Broja, Marc Guiu y Nicolas Jackson.
Solo con varias de esas bajas cerradas, los londinenses tendrían margen para sumar refuerzos ofensivos. Por ahora, el foco principal está en Xavi Simons, pero Garnacho sigue en la mira y no ha perdido terreno en la consideración del club.
Un mes que puede definir su carrera
Agosto se perfila como decisivo para el ex Atlético de Madrid. Más allá de su futuro en clubes, Garnacho necesita minutos de calidad para asegurarse un lugar en la Selección Argentina de cara al Mundial 2026. La falta de protagonismo en el United complica su panorama y un cambio de equipo podría ser clave para ganar continuidad.
Lo que a simple vista fue un simple “like” podría, en realidad, ser una señal calculada. Si las piezas encajan, el joven extremo podría vestirse de azul y blanco… pero esta vez no serían los colores de la Albiceleste.
