Han pasado 11 años desde aquella recordada final del Mundial de Brasil 2014, pero las palabras de Mario Götze vuelven a abrir viejas heridas en la Selección Argentina. El delantero alemán habló con L’Equipe y dejó una confesión contundente sobre lo que significó marcar el gol que definió la historia en el Maracaná.
El atacante reconoció que ese partido no fue uno más: “Ese día todos estaban más nerviosos de lo habitual. Como suplente estaba menos estresado. Al final jugué 30 minutos, que no es mucho, pero tuve un impacto. Y sobre todo, marqué el gol”, recordó con crudeza.
El impacto de un gol eterno
La definición se dio en el tiempo suplementario, cuando Götze sorprendió a la defensa argentina y venció a Sergio “Chiquito” Romero, decretando el 1-0 que le dio a Alemania su cuarta Copa del Mundo. Aquel tanto, más allá de coronar a los teutones, significó uno de los golpes más duros para el equipo de Alejandro Sabella.
El propio protagonista reconoció que no fue consciente de lo que había logrado hasta el final: “Fue un momento de locura. No me di cuenta inmediatamente del impacto porque el partido no había terminado. Fue recién con el pitazo final cuando lo entendimos. Ese gol cambió mi vida para siempre”.
Consecuencias en su carrera
La exposición mediática tras ese gol fue abrumadora. “Al año siguiente en Alemania, los medios y los aficionados hablaban mucho de mí. Con el tiempo, todo se calmó. Fue difícil asimilar que representaba la cima absoluta y que es imposible sostenerse ahí toda una carrera”, confesó.
El delantero admitió que, luego de vivir un instante tan intenso, resultó complicado volver a la rutina: “Después de una experiencia así no es fácil regresar a la realidad”, explicó. Palabras que muestran el costo emocional de haber sido el héroe de una final mundialista.
Una huella imborrable
Más allá de los altibajos posteriores en su trayectoria, Götze siempre será recordado por esa jugada en el Maracaná. Para Alemania significó un título inolvidable; para Argentina, una herida que tardó años en cerrarse y que solo cicatrizó con la conquista en Qatar 2022.
El gol de Götze quedó grabado en la historia del fútbol, y sus propias reflexiones confirman que aquella noche no solo definió un campeonato, sino también el rumbo de toda su carrera.
