El caso de José Luis Espert pone sobre el tapete no sólo el vínculo del poder político con el narcotráfico sino el grado de involucramiento que podría tener en delitos más graves. Espert debió renunciar a su candidatura a senador por LLA por haber recibido aportes del procesado y extraditado por narcotrafico Federico Fred Machado. Patricia Bullrich también recibió aportes, pero en 2023 de Vidal y Alejandra Bada Vázquez por su candidatura a presidente por el PRO, aunque luego se pasó a LLA. Machado y los Bada Vázquez tienen ciertos vínculos financieros en Estados Unidos, con movimientos por más de tres millones de dólares, y otros casi familiares: el primo de Machado y cotitular de la camioneta blindada que usó Espert en su campaña, Claudio Ciccarelli, es socio de María Cecilia Roncero, esposa de Vidal, en EcoFriendly SA, una empresa que comercializa arenas para el fracking en la mina de oro Andacollo en Neuquén.
Como ya es sabido, «Lechuga», como también llaman a Ciccarelli, es pareja de la diputada recientemente reelecta de LLA, Lorena Villaverde, detenida en 2002 en Estados Unidos con 15 kilos de cocaína y U$S 50.000 sin justificar.
Vidal Bada Vázquez, su hermana Alejandra y su mujer María Cecilia Roncero forman o han formado parte de la empresa Transporte El Nacional a través de la cual vendieron un avión Cessna 210E en 13 mil dólares (mucho menos de lo que vale), con la particularidad de tener la matrícula adulterada, justamente la operatoria por la que es juzgado y fue extraditado Machado a EE UU.
Los compradores del avión fueron los hermanos peruanos Saúl Ángel y Steven Alessandro Villanueva Tomas y el padre de ambos, Saúl Ángel Villanueva Echevarría.
Ese Cessna 210 se quedó sin combustible en Ibicuy, Entre Ríos, cuando era piloteado por el piloto brasileño Leonardo Monte Alto Guzmao en compañía de una ex miss boliviana, Jade Calláu Barriga, alias «Chabela». Ambos fueron detenidos cuando se comprobó que llevaban 359 kilos de cocaína y quedaron alojados en la cárcel de Ezeiza.
Por ese caso los Villanueva fueron procesados y condenados luego de ser allanados sus negocios y domicilios. También eran dueños de Rumba Latina, un boliche del Bajo Flores que era frecuentado por las tres chicas que fueron asesinadas en Florencio Varela: Morena Verdi, Brenda Del Castillo y Lara Morena Gutiérrez. En el local bailable, presunto domicilio, fue hallado dinero, cocaína y oro…
También había un simulador de vuelo que se usaba para entrenar a futuros pilotos.
La miss boliviana Chabela (como el piloto Guzmao) quedó detenida en Ezeiza. En esa cárcel ya estaba su tío, también boliviano, pero con DNI argentino, llamado Jorge Adalid Granier Ruíz, alias «El Nono». También es conocido como «El rey de los cielos», por ser el mayor responsable del narcotráfico aéreo en Sudamérica, en particular entre Bolivia y Argentina a través de la provincia de Salta, la vía más utilizada para la llegada del 95% de la droga que llega a Rosario, Santa Fe.
El Nono fue condenado por el caso del avión Cessna, como sus cómplices los Villanueva, su sobrina y el piloto brasileño. Logró una condena menor al aceptar un juicio abreviado para evitar una mayor condena y mayores explicaciones. El piloto también siguió preso. Pero Chabela quedó poco tiempo detenida en Ezeiza. La liberaron el sábado 4 de octubre, un día antes de la renuncia de Espert, después de pagar una multa de sólo $ 2.700.000 y ser expulsada del país tras un sugestivo cambio de carátula.
El Nono es socio del temible Fabio Pelozo, alias «Calavera», un capo del Clan Los Monos, operador en Rosario, también preso en Ezeiza. Calavera fue condenado por instigar desde la cárcel el crimen de dos mecánicos que fueron calcinados como represalia por el robo de una camioneta 4×4 de su organización, cargada con dinero, cocaína y oro. Ambos convivieron en un departamento en CABA (a nombre del Nono) con Gilberto Aparecido Do Santos, alias «Fuminho», uno de los tres capos del Primer Comando Capital PCC brasileño, asesino de otros dos capos, detenido en Mozambique y responsable del narcotráfico desde Bolivia, donde vivió, y Paraguay hacia Brasil y Argentina. Entre los tres pergeñaron en algún momento la creación de un gran Clan Argentino Internacional. Solo El Nono supo mover toneladas de cocaína entre los cuatro países y estableció en poco tiempo una red de narcotráfico con destino a Europa y Asia.
El Nono, verdadero dueño de la droga, como mayorista de cocaína, es el principal proveedor del Bajo Flores. Por esa razón se presume que también era el dueño de la cocaína robada y el posible instigador y receptor del video del triple femicidio.
Fuminho y Calavera fueron sanguinarios y vengativos respecto de los robos internos y si convivieron con El Nono, él también puede haberlo sido con las tres chicas. Los códigos son los mismos «Narcopolítica». De Machado al triple femicidio.
En resumen, el Nono era el dueño de la cocaína que traficaron dos personas en un avión que les vendieron los Bada Vázquez, aportantes a la campaña de Patricia Bullrich, y Roncero, esposa de Vidal Bada Vázquez y socia de Ciccarelli, novio de la polémica diputada Villaverde, primo y presunto testaferro de Fred Machado, el aportante de Espert.
Un cubo mágico de coincidencias.


