Una decisión de Mauricio Pochettino sacudió los cimientos de la selección de Estados Unidos y desató un conflicto inesperado: el técnico argentino dejó fuera de la convocatoria a Christian Pulisic, su máxima figura, y respondió con una frase que ya recorre los medios del mundo. “No soy un maniquí”, lanzó, dejando en claro que no permitirá que ningún jugador se imponga por encima del grupo.
El conflicto surgió cuando Pulisic pidió no disputar la Copa de Oro pero sí estar presente en los amistosos frente a Turquía y Suiza. Pochettino rechazó la solicitud y lo marginó de todos los compromisos. Aunque el delantero aceptó la medida, también confesó que no lograba entenderla. El entrenador, por su parte, fue tajante: “Firmé mi contrato con la federación y soy el entrenador principal”.
Un plantel sin figuras y bajo presión
La ausencia del delantero del AC Milan se hizo sentir de inmediato. Estados Unidos cayó 2 a 1 ante Turquía y luego fue goleado 4 a 0 por Suiza, acumulando así cuatro derrotas consecutivas, una racha negativa que no sufría desde el año 2007. La prensa local fue lapidaria: el The Washington Post calificó la actuación del equipo como “abominable”.
A pesar de la tormenta, llegó el alivio. El contundente 5 a 0 ante Trinidad y Tobago trajo algo de calma. Con goles de Tilman, Agymemang, Aaronson y Wright, el conjunto norteamericano respiró, aunque la tensión no cesa. “Nuestra decisión fue optar por los jugadores que desean competir”, volvió a remarcar el técnico argentino.
Pochettino, respaldado por leyendas del fútbol estadounidense
Pochettino no está solo en esta batalla. El histórico Landon Donovan, máximo goleador de la selección norteamericana, apoyó al DT y apuntó contra el compromiso de Pulisic: “Tenía que responder. No podía quedarse callado ni dejar que su mejor jugador lo pasara por encima así nomás”.
También se sumó a las voces a favor Alexi Lalas, recordado ex defensor con pasado en los mundiales de los años 90. “No siento pena por Pochettino, pero era importante que se plantara y dejara claro que ningún jugador está por encima del equipo”, opinó, validando la postura de firmeza del argentino en un contexto tan delicado.
Lo que viene para Estados Unidos
En medio de este terremoto mediático, Estados Unidos se prepara para seguir compitiendo en el Grupo D de la Copa de Oro de la Concacaf. Este jueves se enfrentará a Arabia Saudita, y el próximo domingo 22, a Haití. Sin su jugador más determinante, la selección buscará demostrar que aún puede ser competitiva.
Los próximos partidos serán clave para definir si este grupo puede consolidarse sin la jerarquía de Pulisic. Para Pochettino, son también una oportunidad para reivindicar su liderazgo y reafirmar que el colectivo está por encima de cualquier nombre propio.